Capítulo 1

LA PRINCESA Y EL PERIODISTA

CAPÍTULO 1: A TRAVÉS DE LA PANTALLA

BRUSELAS, BÉLGICA

INT. / AEROPUERTO DE BRUSELAS, ZONA DE LLEGADAS / DÍA

Andrés acaba de llegar a Bélgica. Es un joven periodista español que como muchos otros se vio obligado a buscarse un futuro fuera de su país. En el área de llegadas del aeropuerto le espera su amigo Henry, un camarógrafo de televisión que trabaja en el Canal 1 de la televisión belga. Andrés lleva un maletín con un laptop y una gran maleta de ruedas. En ese instante Henry le saluda entre la gente.

Henry: ¡Andrés! ¡Andrés, estoy aquí! (Sonríe)

Andrés: ¡Henry! ¡Jajaja! ¿Pero qué haces tú acá, tío? Dijiste que tenías que trabajar hoy. Eres un embustero.

Henry: ¡Te mentí! Jajaja.

Andrés: ¿Cómo estás? ¿Qué tal te va?

Henry: Bien, todo como siempre… ¿Y tú? ¿Qué tal el viaje? (Ambos se saludan, se dan un abrazo)

Andrés: Se hizo corto la verdad, apenas dos horas y algo, aunque salimos con algo de retraso de Madrid. ¿Está lloviendo? (Mirando hacia los ventanales del aeropuerto)

Henry: Sí, acaba de empezar ahora… Ya sabes como es el clima aquí. Luego sale el sol ya verás.

Andrés: Mañana a primera hora empiezo en televisión. Espero me vaya bien. ¿Crees que me hagan indefinido?

Henry: No lo sé, eso depende si les gustas y desempeñas bien tu trabajo. La verdad el informativo de la mañana lo ve poca gente.

Andrés: Me han dicho que voy a presentar con una chica, Silvie…

Henry: Silvie Montblanc, la conozco, está buenísima… (Sonríe pícaro)

Andrés: Jajaja. Vengo a trabajar, no empieces. Además en España…

Henry: Ya lo sé, ya… Desde tu divorcio no tienes ganas de conocer otras mujeres pero chico ya hace más de 6 meses de eso. Tienes que seguir adelante, Andrés.

Andrés: Lo sé Henry, y tienes razón, sólo necesito tiempo, eso es todo.

Henry: Bueno vamos, que tengo el coche en el parking. (Ambos amigos se van)

DÍAS DESPUÉS

INT. / PALACIO REAL, DORMITORIO DE ELIZABETH / DÍA

La princesa Elizabeth de Bélgica se encuentra maquillándose delante de un espejo, la joven prefiere hacerlo ella misma que contar con la ayuda del servicio de palacio. Elizabeth es una hermosa muchacha de 27 años heredera al trono belga. La chica es interrumpida por su tía, la simpática y estrafalaria Infanta Margaret.

Margaret: ¡Te tengo una sorpresa que te vas a quedar muerta en la bañera, cariño!

Elizabeth: ¡Tía Margaret! ¡Te tengo dicho que toques la puerta antes de entrar! (Sonríe resignada)

Margaret: Calla que tienes que poner la tele ahora mismo…  ¿Dónde está el mando?

Elizabeth: Debajo de la almohada…

Margate: Desordenada que eres… ¡Te pareces a tu padre!

Elizabeth: Jajajaja. Ay tía ahora no tengo tiempo de ver la tele, tengo que salir con mi mamá en 15 minutos. Recuerda que hoy tenemos una visita oficial a Amberes para…

En ese momento, Margaret enciende la tele. En pantalla vemos a Andrés Cerezo, el nuevo presentador de noticias de la mañana. Elizabeth no presta atención, sólo escucha su voz, mientras termina de peinarse frente al espejo que hay sobre la cómoda.

Margaret: Uno así es lo que yo necesito… Omg…

Elizabeth: ¿De qué hablas tía? ¿Qué necesitas qué?

Margaret: Un novio… y tú otro… (Sonríe) ¿Qué te parecería este?

La princesa voltea la vista y dirige su mirada al televisor… En ese instante Elizabeth se queda muda al ver a Andrés en pantalla. 

Escuchamos música (A prueba de ti – Malú). El rostro de la princesa se ilumina, en primer plano vemos su cara y la de Andrés en la pantalla de la tele contando las noticias. Escuchamos la canción de la pareja protagonista.

INT. / PALACIO REAL, SALA / DÍA

El rey Edward y su esposa, la reina Anne, conversan mientras toman el desayuno y leen la prensa del día. Mientras la reina bebe de una copa de zumo de naranja, su marido ojea uno de los periódicos de tirada nacional.

Edward: ¿Viste lo que dice aquí? Siempre igual… la prensa no deja de inventar chismes, y ahora esto...

Anne: ¿Qué dicen, mi amor?

Edward: Que según una encuesta, si hoy se hiciera un referéndum, al menos el 25 por ciento de los ciudadanos estaría dispuesto a votar por que el país fuera una república. ¿Lo puedes creer?

Anne: Bueno, Edward, son otros tiempos. El mundo ha cambiado mucho desde que tú y yo empezamos en este trabajo. Ya son más de 20 años.

Edward: Creo que la culpa de esto la tienen las relaciones fallidas de tu hija. Ninguno de sus novios la merecía, no eran más que gañanes.

Anne: Ah, muy bonito, cuando la niña hace algo mal es mi hija, ahora cuando hace algo bien es la tuya, pero serás… (Enojada)

Edward: Si es que se busca cada chico… Ya van dos que le dije que no. Si me hiciera caso y accediera a salir con Robert de Valois, otro gallo cantaría. Te lo digo yo.

Anne: Robert es un buen muchacho, Edward, pero la niña no está enamorada de él, es cierto que han salido algunas veces pero nada serio.

Edward: Robert es el hombre que le conviene, el hombre que podría ejercer de príncipe consorte el día que Elizabeth sea reina.

Anne: Pero en el amor no se manda, Edward.

Edward: Elizabeth no se da cuenta de quién es y lo que representa para este país. Debe casarse con un hombre de alta sociedad y de buena familia. ¿Y qué mejor que emparentar con los Duques de Valonia? Dime. Elizabeth tiene que responder ante 10 millones de personas, no sólo ante nosotros. ¿No lo entiendes?

Anne: Yo sólo quiero la felicidad de nuestra hija, eso es todo. Y quiero un buen chico para ella y que se case enamorada.

Edward: Qué sensiblera eres…. Ves muchas telenovelas… (Pasando una hoja del periódico con rabia)

INT. / PALACIO REAL, DORMITORIO DE ELIZABETH / DÍA

Tía y sobrina prosiguen su conversación… Ambas de pie.

Margaret: ¿Qué, a poco no es guapo el muchacho, no me digas? (Sonríe con picardía) Mucho mejor que el bobo ese de Robert… donde va a parar, mi niña.

Pero su sobrina no responde, solamente mira detenidamente a Andrés en la tele. El periodista va contando las noticias del día en Bélgica y el mundo. Margaret y Elizabeth siguen viendo la televisión.

INT. / ESTUDIOS CANAL 1 / DÍA

En pantalla, el presentador continúa con el noticiero…

Andrés: El primer ministro Charles Delacroix se encuentra hoy de visita oficial a Berlín donde se va a reunir con la canciller alemana Angela Merkel para tratar diversos asuntos sobre política económica internacional… Por otro lado, la cumbre del G20 que se reunirá este viernes en la ciudad canadiense de Montreal… (El sonido pasa a segundo plano)

INT. / PALACIO REAL, DORMITORIO DE ELIZABETH / DÍA

La princesa observa el televisor sin decir nada, en silencio, es como si el mundo se hubiera detenido y sólo existieran ella y Andrés. En ese instante su tía la hace “volver a la realidad”.

Margaret: ¡Ey nena! ¿Qué te dio un aire o qué? Te estoy hablando…. (Algo molesta)

Elizabeth: ¿Qué, qué decías? (Mirando a su tía)

Margaret: No hace falta respondas… si ya se ve que te quedaste embobada, no me extraña… (sonríe).

Elizabeth: Ay tía, por favor no digas tonterías, estaba distraída pensando en…  en…

En ese momento la joven vuelve a mirar a la pantalla. La princesa no puede dejar de ver el noticiero, apenas le interesan las noticias, es más, no suele verlas por más que su padre el Rey la obliga… pero hoy es diferente. Elizabeth tiene un motivo para verlas. Un chico sencillo, atractivo y a la vez profesional del periodismo serio que le ha llamado poderosamente la atención.

Margaret: Es nuevo, dicen que es español pero habla nuestro idioma a la perfección. Se llama Andrés Cerezo.

Elizabeth: Está muy guapo. (Sonríe dulce, mirando la pantalla y se sienta en una silla cerca de la tele)

Margaret: Y presenta mu bien… (Sonríe)

Elizabeth: Sí… (Mirando a Andrés en la tele, ilusionada como una quinceañera)

Margaret: Ay mi vida, un chico así es lo que tu necesitas. (Le acaricia el cabello con ternura)

Elizabeth: Qué mas quisiera yo que casarme con un hombre así, tía Margaret. Pero… mi padre jamás me dejaría.

Margaret: Pasa de lo que diga tu padre, cariño… La vida es una sola y hay que vivirla. Robert no es el chico que te conviene, es un playboy, cada día anda con una distinta. (Cómica) Pero claro, como es de la nobleza y su papá es Duque de no se donde…. ¡Es un señoriiiiito!

Elizabeth: Jajaja, estás loca…

Margaret: Pero tengo razón. Ya quisiera ese vago bueno para nada tener el talento de este muchacho.

Elizabeth: La verdad me gusta, se ve inteligente, nada que ver con otros que he conocido… ¿Y cuanto lleva en las noticias? ¿Hace mucho que está en este canal?

Margaret: Apenas un par de días, mi niña… Lo malo que lo dan a esta hora de la mañana y no creo que lo pueda seguir viendo... Yo lo conocí ayer de casualidad por la tele mientras desayunaba con tu madre en la sala.

Elizabeth: ¡Ay mi madre! ¡Lo olvidé! Mira que hora es… (Se levanta de la silla nerviosa) ¡Mi mamá me va a matar! (Tomando su bolso de la cama)

Margaret: Hija pero que prisas, pareces un ciclónnnnnnnn….

Elizabeth: ¡Calla que tú tienes la culpa! ¡Tú y el Andrés ese…!

Margaret: Sí, sí… ahora la culpa es mía… no te fastidia…

Elizabeth: Callate, jajaja. (Se va)

Margaret: Jajaja… ¡Chao mi reina!!! (Pensando: nunca mejor dicho)

Mientras la princesa se marcha a toda prisa sin mirar atrás, su tía mira a Andrés en la tele y habla consigo misma.

Margaret: No te preocupes hija que yo me voy a encargar de que conozcas a este muchacho, ya verás… (Sonríe)

INT. / ESTUDIOS CANAL 1 / DÍA

El noticiero de la mañana termina y Andrés conversa con Silvie, su compañera de trabajo.

Silvie: La verdad que estoy sorprendida, la cámara te adora, Andrés. El director está muy contento con tu trabajo, cariño. (Coqueteando con él)

Andrés: Gracias, eso espero… Estuve trabajando en España durante tres años presentado un informativo matutino en Antena 3.

Silvie: Se nota… ¿Oye, te… te gustaría salir a tomar algo esta noche?

Andrés: ¿Esta noche? No puedo… mañana tengo que madrugar y…

Silvie: Mañana es sábado mi amor. (Sonríe sensual)

Andrés: Ya pero me voy de fin de semana a París y salgo temprano.

Silvie: Entiendo… Lástima, podríamos ir juntos… Me encanta París, bueno toda Francia es maravillosa.

Andrés: En otra ocasión… ¿Sí? (Sonríe)

Silvie: Está bien… (Sonríe resignada) Espera, tienes mal la corbata… Deja que te la coloque bien, a ver…

En ese instante la explosiva rubia le coloca la corbata al cuello de la camisa y la acaricia el hombro sobre la chaqueta del traje. Silvie se siente muy atraída por Andrés pero él no se da apenas cuenta.

Silvie: Ahora sí, mucho mejor… Te luce genial… (Sonríe dulce)

Andrés: Gracias… (Sonríe, tímido)

Silvie: ¿Te puedo hacer una pregunta personal? (Finge timidez)

Andrés: Sí, claro. No hay problema.

Silvie: ¿Tienes novia?

Andrés: Bueno… la verdad… no… ahora mismo no. Hace seis meses que me separé de mi mujer.

Silvie: Ahm… así que estuviste casado. (Acariciándole el pecho sobre la camisa)

AL DÍA SIGUIENTE

INT. / PALACIO REAL, JARDINES, PISCINA / DÍA

La princesa Elizabeth, en bikini blanco, hace varios largos en la piscina de palacio, bajo la luz del sol. La joven es una experta nadadora. En ese momento aparece la doncella, Shaila.

Shaila: ¡Eli! Apúrate que ya va a ser la hora, guapa. ¡Sal ya del agua que te van salir ancas de rana!

Elizabeth: ¡No me daba cuenta! ¡Las noticias!

Shaila: Hala, corre, que yo tengo que hacer oficio… Tengo mucho trabajo esta mañana, pasar aspiradora, limpiar ventanas… fregar pisos… Luego me cuentas.

Elizabeth: Ahora mismo voy… ¡Por poco y me olvido! (Saliendo de la piscina, toma una toalla y se seca el cabello)

La princesa se pone una toalla grande al cuerpo y se marcha a toda prisa hacia el palacio, ansiosa por ver a Andrés en televisión nuevamente. Y así será todas las mañanas a la misma hora…

INT. / MANSIÓN VALOIS, COMEDOR / DÍA

Los Duques de Valonia, Sebastian y Chantal, degustan el desayuno en compañía de sus hijos, el ya mencionado Robert y la hermana de éste, Rebecca. Los cuatro conversan.

Sebastian: ¿Qué pasa con Elizabeth? ¿No van a salir de nuevo o qué hijo?

Robert: No sé, esa chica es muy rara…

Rebecca: Es princesita, qué quieres… tonta es poco… (Se burla)

Chantal: Ay ya, Rebecca, no seas mala… Es cierto que la princesa Elizabeth es muy tímida y algo sosa pero… no deja de ser lo que es, la heredera al trono.

Rebecca: Bah… menuda heredera, ya bien dice mi amiga Silvie que parece una pánfila, siempre tan modosita y formal. (Partiendo una tostada con mermelada con ayuda de cuchillo y tenedor)

Robert: Silvie es republicana, Rebecca. ¿Qué va a decir ella? Jajaja.

Chantal: Elizabeth puede ser aburrida pero no se puede negar es una muchacha muy bella e inteligente. No en vano estudio dos carreras y habla 5 idiomas. Pasó 4 años estudiando en Australia.

Sebastian: Tienes que terminar con esa periodista, Robert, la Silvie esa. No me gusta para ti.

Robert: ¿Qué quieres que me case con la insípida de Elizabeth? Estamos en el siglo XXI, no en la Edad Media. (Bebiendo de una taza de café)

Chantal: Tu padre tiene razón, Robert. La princesa es la mujer que te conviene. Es guapa, inteligente… un poco sosita sí, pero bueno… tampoco podía ser perfecta, hombre.

Sebastian: Ademas que la tal Silvie no tiene muy buena fama según me han contado.

Robert: Silvie y yo solamente lo pasamos bien papá, eso no quiere decir que me vaya a casar con ella. No te preocupes. Insistiré con Elizabeth si eso es lo que quieres. Ser el príncipe consorte de este país no está a la alcance de cualquiera. (Sonríe con astucia)

Rebecca: Ay ya, dejen de hablar de esa gansa... por el amor de Dios… A poco y nunca ha estado con un hombre, tiene cara de mojigata, jajaja.

Sebastian: Jajajaja, es lo más probable.

Robert: No se preocupen por eso que yo la enseño… (Sonríe con picardía, guiñando un ojo)

Chantal: ¡Bueno ya! Este ni es momento ni lugar de hablar de esas… intimidades, por favor

Rebecca: Jajajaja. Nosotros no tenemos la culpa de que esa lleve el título de Sor Elizabeth de Bruselas…

Robert: Jajajaja.

INT. / PALACIO REAL, DESPACHO DEL REY / DÍA

El rey Edward mantiene una conversación con Jacques, el jefe de la Casa Real. Ambos charlan sentados a cada lado del escritorio.

Edward: Tengo cáncer de estómago, Jacques.

Jacques: Imagino la reina y su hija no lo saben…

Edward: Aún no, confío en poder mantenerlo en secreto al menos de momento.

Jacques: ¿Qué le han dicho los médicos? ¿Lo han detectado a tiempo?

Edward: Sí, el tumor está en fase inicial todavía pero no quiero que esto trascienda a la prensa.

Jacques: Comprendo, Majestad. No se preocupe. Pero pienso que debería hablarlo con su familia.

Edward: Es por eso que insisto tanto en que Elizabeth se case pronto, por si algo me pasa.

Jacques: La princesa es muy joven, todavía no estaría preparada para ocupar el trono, Majestad.

Edward: Espero que Dios me de salud y me ayude a superar esta enfermedad pero no dejo de preocuparme por la institución.

Jacques: Siempre quedaría la opción de la Infanta Margaret…

Edward: Ni hablar, mi hermana es una loca sin principios ni sentido del deber. Jamás dejaría el trono a cargo de Margaret y lo sabes.

Jacques: Bueno, vamos a ver que pasa y esperemos el tratamiento funcione, Majestad. No nos adelantemos a los acontecimientos. Mantendré la discreción en todo momento respecto a este asunto hasta que usted decida revelarlo a la familia Real.

INT. / PALACIO REAL, SALA / NOCHE

Elizabeth conversa con su doncella y mejor amiga, Shaila, una joven poco agraciada físicamente pero tremenda confidente. Ambas chicas charlan, sentadas en el sofá.

Elizabeth: Si le vieras… es super guapo y lo hace muy bien. (Sonríe dulce)

Shaila: Pues chica no le conozco… a esa hora de la mañana tengo mucha tarea en palacio y como para ponerme a ver la tele, maja.

Elizabeth: Si no es por mi tía Margaret ni le hubiera conocido…

Shaila: ¿Te gusta verdad?

Elizabeth: ¿Quién Andrés?

Shaila: No, el jardinero… (Con cara de tonta) ¿Quién va a ser?

Elizabeth: Bueno sí, me gusta, pero… (Triste) Poder conocerle es otra cosa.

Shaila: ¿Qué pasa? Tú eres princesa y seguro te sería fácil conocerle…

En ese momento la infanta Margaret entra en la sala, totalmente vestida de negro y con un perro blanco chiquito en brazos…

Margaret: ¡Good night everybodyyyyy!!! ¿Qué tal niñas? ¿Qué hacen? ¿Ver la novela?

Shaila: Hola Alteza… (Haciendo la reverencia)  No, estamos charlando sobre cosas de chicas. (Sonríe)

Margaret: Te tengo dicho me llames Margaret, niña, Mar-ga-ret. Eso de Alteza suena a marca de yogures baratos…

Elizabeth: Estamos hablando de Andrés, el periodista de la tele.

Margaret: Uhhh, así que te gustó. Lo sabía… ¡Ale chucho! (Dejando al perro en el suelo) ¡A tomar vientos por ahí! (El can sale disparado hacia el pasillo mientras Margaret se sienta con ellas en el sofá)

Shaila: Elizabeth quiere conocerle pero lo ve imposible.

Margaret: En esta vida no hay nada imposible. Se las digo yo. Vamos a ver… ¿Tú que quieres, conocer a Andrés, no? Pues… deseo concedido… (Chasqueando los dedos)

Elizabeth: Ay tía, no te burles… que hablo en serio.

Margaret: Nada que ver… Precisamente esta tarde estuve hablando con el director de informativos del canal 1 y… (Sonríe)

Elizabeth: ¿De qué hablas? ¿Qué has hecho? (Preocupada)

Margaret: Espérate y ya vas a ver, ten paciencia… ya te contaré… (Sonríe pícara)

SEMANAS DESPUÉS

INT. / APARTAMENTO DE SILVIE, COCINA / NOCHE

Silvie y su amiga Rebecca conversan, la rubia prepara la cena ayudada por la morena.

Rebecca: Lo he visto por la tele… la verdad es muy guapo.

Silvie: Pues no se me va a escapar… vaya que no. (Sonríe con picardía)

Rebecca: ¿Pero no y que estabas saliendo con mi hermano?

Silvie: Lo mío con Robert terminó hace tiempo… Ahora quien realmente me interesa es Andrés pero no sé como hacer para seducirle sin ser demasiado obvia… ¿Algún consejo?

Rebecca: Pues… yo que tú… (Ambas siguen la conversación pero no podemos escuchar lo que dicen)

INT. / CAFETERÍA / DÍA

Andrés y su amigo Henry charlan acerca de trabajo. Ambos chicos conversan sentados a una mesa mientras toman sendas cervezas.

Andrés: Me cambian a la edición estelar por la noche. Empiezo mañana en nuevo horario.

Henry: Qué bien, eso quiere decir que les gusta tu trabajo. Me alegro mucho por ti.

Andrés: ¿Y tú como vas? ¿Sigues de cámara en la serie esa? ¿Es una comedia cierto?

Henry: Sí y no veas que risas, es una locura ese set de grabaciones. Estoy muy contento. (Sonríe)

Andrés: ¿Y que hay de tu novia? A ver si me la presentas un día de estos.

Henry: Sí, es verdad, un día de estos salimos los cuatro a cenar. Es raro que no conozcas a Rebecca, es la mejor amiga de Silvie.

Andrés: No sabía que ellas dos se conocían…

INT. / PALACIO REAL, SALA / NOCHE

La princesa Elizabeth avisa a su doncella y amiga Shaila. La chica se sienta en el sofá y mira la pantalla del televisor, comienzan las noticias del canal 1 de la televisión belga.

Elizabeth: !Corre Shaila, que ya sale!!

Shaila: ¿Que ya sale quién? ¿Qué quieres? Tengo que limpiar tu cuarto... (Con una fregona en mano, se coloca las gafas con un dedo al centro de la nariz)

Elizabeth: Andrés Cerezo, el presentador de informativos, van a ser las 8. Ahora presenta por la noche.

Shaila: Ay la que te ha dao con el tal Andresito ese... Hija... no será pa tanto.... Me tienes aburridita…

En ese momento en pantalla aparece Andrés. Ambas muchachas se quedan pegadas al televisor.

Shaila: !Retiro lo dicho! (Lanza la fregona y se sienta con la princesa en el sofá)

Elizabeth: Es guapísimo, me encanta... (Sonríe dulce e ilusionada)

En pantalla Andrés Cerezo comienza el noticiero de la noche...

Andrés: Muy buenas noches, bienvenidos. (Sonríe) Titulares y comenzamos... (Mirando sus papeles, la imagen da paso al avance de noticias)

Shaila: ¿Así que este es el tipo del que tanto me hablabas? Válgame Dios... 

AL DÍA SIGUIENTE

INT. / APARTAMENTO DE ANDRÉS, PUERTA PRINCIPAL / DÍA

Silvie llega a casa de Andrés, la explosiva rubia toca al timbre y espera. Silvie vuelve a tocar el botón. Dentro de la casa, Andrés sale de la ducha en toalla a la cintura y se dispone a abrir.

Andrés: ¡Ya va, ya vaaaaaa!! Quién será a esta hora… un domingo por la mañana…

En ese instante la puerta se abre y Silvie le ve así, en toalla. La presentadora se queda muda y se muerde el labio con deseo.

Andrés: ¡Silvie! ¿Pero qué haces tú acá? (Avergonzado)

Silvie: Buenos días, Andrés… ¿Te pillé en mal momento…? Lo siento mi niño…

Andrés: Estaba en la ducha… no esperaba visita y menos a esta hora…

Silvie: ¿Qué no me vas a invitar a pasar o qué, guapo? (Entrando en la casa, bamboleando las caderas en minifalda)

Andrés: Voy a vestirme, dame 5 minutos…  (Se va corriendo a su cuarto)

Silvie: Hoy vas a ser mío, Andrés… (Sonríe y se moja los labios, abriéndose el escote un poco más con una mano)

INT. / PALACIO REAL, DESPACHO DEL REY / DÍA

Toda la familia Real se reúne, el Rey Edward tiene algo que decirles. Sentado a su mesa, les cuenta a su esposa, su hija y su hermana sobre su enfermedad.

Anne: Díos mío, no puede ser…  ¡Nooo!! Lo que nos faltaba ahora… Cáncer…

Margaret: Calma cuñada, tranquilízate… A ver, Edward… ¿Qué dicen los doctores? ¿Qué esperanzas hay?

Edward: Empiezo la quimio mañana… después vendría la operación. No vamos a contar nada de esto a nadie, ni a la prensa ni mucho menos al parlamento ni al primer ministro. Todavía no, no quiero que se forme un revuelo con la noticia, ya saben como son los periodistas en este país.

Elizabeth: Pero papá, tarde o temprano se van a enterar…

Edward: No tienen por qué, voy a irme de viaje a Estados Unidos unos meses, nadie sospechará nada. Mientras tanto tu madre y tú se encargarán de los actos oficiales. Jacques les organizará las agendas.

Margaret: Yo voy contigo…

Edward: Está bien… Margaret.

Elizabeth: Papá… (Con lágrimas en los ojos)

Edward: Por eso tienes que pensar en casarte pronto hija… no sé si voy a superar la enfermedad, y en caso de que no lo lograra…

Anne: Por favor no digas eso, mi amor…

Elizabeth: Verás como sí… hoy en día hay muy buenos tratamientos y…

Edward: Necesito que me prometas algo, hija.

Elizabeth: Lo que sea, papá, dime. ¿Qué quieres que haga?

Edward: Tienes que casarte con Robert de Valois.

Elizabeth: ¿Quéee? (Escuchamos música incidental)

Al mismo tiempo la reina Anne y su cuñada la infanta Margaret se miran sin decir nada.

INT. / APARTAMENTO DE ANDRÉS, SALÓN / DÍA

Andrés, ya vestido con camisa blanca y jeans, aparece en la sala de nuevo. Silvie se levanta del sofá y…

Silvie: Siento haber venido sin avisar, Andrés, venía a invitarte a comer y salir a dar una vuelta esta tarde. Podíamos ir al cine. Echan una película muy buena, se estrena hoy.

Andrés: Bueno… sí, por qué no… Hoy no tenía planes así que…

Silvie: Pues no se hable más… (Le toma de la mano) ¡Te voy a llevar a un restaurante que te va a encantar, ya verás! (Sonríe coqueta)

Andrés: Pero que no sea demasiado caro… ¿Eh?

Silvie: Bah, no te preocupes… yo invito. ¿Te parece? (Sonríe seductora)

Andrés: OK… Siendo así entonces sí… (Sonríe)

Silvie: Jajaja. No te vas arrepentir, te lo prometo. Vamos… (Se marchan)

INT. / PALACIO REAL, DORMITORIO DE MARGARET / DÍA

La infanta Margaret trata de consolar a su sobrina. Elizabeth llora preocupada por la salud de su padre.

Margaret: Ya verás que todo va a ir bien. Yo misma voy a estar con Edward todo este tiempo.

Elizabeth: Me gustaría poder acompañarlos pero… mi papá no me deja, dice que mi obligación es estar aquí.

Margaret: No llores, mi vida… (Le limpia las lágrimas con una mano, los ojos miel de la princesa brillan como luceros)

Elizabeth: Tengo miedo que la prensa se entere… seríamos el centro de todas las miradas en este país.

Margaret: ¿Vas a casarte con Robert?

Elizabeth: Claro que no… yo no le amo, sólo hemos salido un par de veces, nada más… No me gusta… no siento nada por él.

Margaret: El que te gusta es otro, lo sé…

Elizabeth: Andrés es sólo un sueño, alguien inalcanzable que sale en televisión. Más nada.

Margaret: ¿Eso crees? Pues estás muy equivocada mijita… Porque muy pronto le vas a conocer en persona.

Elizabeth: ¿Qué? ¿Estás hablando en serio? (Sonríe, aún con lágrimas en los ojos)

Margaret: Y tan en serio… (Sonríe)

Elizabeth: ¡Te quiero tía Margaret! (Sonríe feliz e ilusionada) ¿Qué haría yo sin ti?

Margaret: Vestir como una vieja… Ahora mismo vamos a elegir el trapo más sexy que tengas y eso te vas a poner para impactar a Andrés. Ese hombre va a caer rendido a tus pies en cuanto te vea. ¡Ven acá! (La toma del brazo y se la lleva obligada)

Elizabeth: ¡Jajaja, estás loca! ¡Tíaaaa!

CONTINUARÁ…